viernes, 20 de agosto de 2010

REDES SOCIALES

A Roberto Zatarain.

Cuando uno se da cuenta lo que se está tejiendo a través de las redes sociales del internet, es cuando comprende el plan divino del corazón.

Somos uno conectado al todos.

En la red todos somos iguales. Ni uno es más que otro. Ni uno menos, tampoco.

Agradezco la conexión vibratoria que nos brindan las redes sociales en la red del internet. Uno a uno vamos formando el todos. Unidos por dentro, desde el mundo interior.

Personalmente me identifico más en el twitter que con el facebook. Soy amante de la síntesis y la palabra.

Sin embargo, ambos me tienen sorprendido. No tengo palabras para agradecer tantos corazones vibrando al mismo tiempo. Cada latido es un suspiro más de fe y esperanza.

Nos estamos uniendo. Formando la red. Estrechando lazos. Fortaleciendo la familia galáctica.

El internet es el ejemplo más claro de que el mundo virtual del Espíritu es tan real como el de la materia. De hecho, el Espíritu es el que transforma la materia. Y las redes sociales son la prueba irrefutable de que así es.

Hoy por hoy, las redes sociales tienen más habitantes que casi todos los países del planeta. Millones de personas reunidas sin institución alguna de por medio.

Reconectados al corazón, desenchufados de la razón institucional.

Ha nacido una nueva conciencia colectiva.

Bendiciones a toda la red luz.

Twitter: @SantiagoPando

LIBERARTE

Liberarte de prejuicios es el arte de la vida.

Es el camino hacia al interior donde la belleza y el arte iluminan la mirada.

Los prejuicios ensucian nuestra forma de ver la vida. Si lo negativo no se revela a positivo, no hay magia. Ni en el cine, ni en la propia vida.

Los que usaron el miedo como forma de manipular almas, hoy están aterrados ante la luz de la verdad liberada de prejuicios.

Es imposible amar y juzgar al mismo tiempo.

Amar es liberarnos en luz, juzgar es encerrarnos en tinieblas. Sólo el amor puede liberar lo que el prejuicio encarceló.

Liberarte es abrir el diafragma de los ojos a la luz.

@SantiagoPando